Antes fue Pablo Iglesias, ahora Carolina Bescansa, quien
dice que Alberto Garzón se debe quitar la mochila, que les da a mucha gente
pena que Alberto Garzón, el político mejor valorado, no forme parte de su
candidatura, para ello debe traicionar sus ideales, debe dejar de lado su
mochila.
La mochila que debe dejar atrás Alberto Garzón y que tanto
le pesa a Podemos, es la pesada mochila que muchos llevamos con orgullo, como
si llevásemos el más preciado tesoro, la mochila de la dignidad. Es la
mochila de la izquierda, de la lucha por la República, es la mochila de
aquellos que lucharon por unos ideales, de aquellos miles que todavía hoy esperan en fosas comunes y cunetas
justicia y reparación, de generaciones
de republicanos, de represaliados, de antifranquistas, de aquellas familias enteras que emprendieron
el camino del exilio, de los miles de españoles que murieron en los campos de
concentración nazis, de esos hombres que liberaron París de los nazis y les
rinden fuera el homenaje que se les niega en su patria. Es la mochila de mujeres que
sufrieron las vejaciones del franquismo, de aquellas que le cortaban el pelo y
les obligaba a ir en procesión con las
cabezas rapadas al cero y después de haberle dado aceite de ricino para que
fuesen haciéndose sus necesidades piernas abajo, de aquellas que violaron,
algunas niñas, de los bebes robados.