Llama la atención que entre la gavilla o debería decir el
haz* de incompetentes, inútiles, ineptos, cínicos y muy reaccionarios ministros
que componen el gobierno del hombre plasma, primer ministro de la monarquía más
corrupta y anacrónica de Europa, solo comparable con monarquías la de Tailandia
o los países islámicos, el peor valorado por detrás, del ministro con intereses
en empresas armamentísticas, Luis
Morenes (3,11). O del ministro que participo en la
consolidación de la actual crisis actual Luis de Guindos (3,39) .
También del misógino encargado de hacer de la Justicia un títere dócil
del gobierno al servicio de las castas corruptas, Gallardón (3,39).
Incluso por detrás - que ya es decir - de la más que incompetente
ministra para el desmantelamiento de los derechos laborales y la promoción del
desempleo que su única solución para remediarlo es la intervención de la Virgen
del Rocío, Fátima Báñez (2,86). Es
más, por detrás de la muy ineficaz, la
presunta corrupta que presuntamente tiene cogido de los huevines al primer
ministro de su católica majestad, desmanteladora de la sanidad pública, que ha
recortado sin remordimientos de conciencia el derecho a la vida de las personas
dependientes, la cual promueve la privatización para los negocios privados de
miserables empresarios, incluso por detrás de esta beneficiaria de la trama
Gürtell, Ana Mato (3,19). Él es el ministro peor valorado, José Ignacio Wert , tiene guasa que sea él, precisamente él, quien diga con una nota de 2,86 :
"Si ese
estudiante que no puede conseguir un 6,5 está bien encaminado o debería estar
estudiando otra cosa".
Se comprende ahora porque es incapaz de entender su propia letra |
Pero realmente hay una cosa que nos olvidamos, que todos
estos ineptos ministros, beneficiarios de oscuros intereses tienen un jefe o
dos, que Wert es solo el payaso de las bofetadas, el bocazas con el cual
desviar la atención de las corruptelas que se ceban de lleno tanto en el
partido que sustenta al gobierno, como a miembros del mismo Gobierno y de la
casa del jefe supremo de este corrupto Régimen. ¿Pero qué se puede esperar de un gobierno
cuyo primer ministro es incapaz de leer hasta su propia letra? Y lo que es más grave: ¿Qué se puede esperar
de un pueblo que contempla impasible como les roban hasta los tuétanos tomándoles
por imbéciles de todas las formas posibles habidas y por haber y se queda
esperando a ver si gana la “Roja” para salir a la calle a celebrarlo?
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